La estrategia audaz de François Bayrou: ignorar a la extrema derecha para disminuir su influencia.

El nuevo primer ministro de Francia, François Bayrou, tiene un plan para la política. Él no quiere trabajar con los políticos de derecha, sino que quiere prohibirlos.

Bayrou piensa que si todos ignoran a los políticos de derecha, la gente dejará de apoyarlos. Cree que la gente no votará por ellos si piensan que son "marginados

Bayrou dice que hay políticos buenos y malos, y que los de derecha son los malos. Si los ignoramos, su popularidad bajará porque nadie quiere votar por alguien que no tiene poder.

Bayrou quiere que la gente vea que la líder de derecha, Marine Le Pen, tiene problemas con la justicia. Si la gente ve que nadie la apoya y que su partido está prohibido, votarán por alguien más.

Algo similar pasó en Alemania con el partido "Alternativa para Alemania". Aunque intentaron ignorarlos, su popularidad aumentó mucho, quizás por ayuda externa.