Minoxidil reinventado: el auge de las pastillas orales en el tratamiento de la pérdida de cabello.

El minoxidil, conocido como Rogaine, se usaba para la pérdida de cabello en los años 90. Ahora, los médicos lo recetan en pastillas de dosis baja para ayudar a hombres y mujeres a mantener o recuperar el cabello.

El minoxidil se desarrolló originalmente para tratar la presión arterial alta. Se descubrió que un efecto secundario era el crecimiento del cabello.

El minoxidil en pastillas puede ser más efectivo que la solución tópica porque se absorbe mejor. También es más conveniente tomarlo una vez al día que aplicarlo dos veces al día.

Las dosis bajas de minoxidil en pastillas pueden reducir los efectos secundarios, como mareos y palpitaciones. No se recomienda para personas con problemas cardíacos, embarazadas o en período de lactancia.

Los dermatólogos suelen recetar minoxidil para la caída del cabello, aunque está aprobado para la presión arterial alta. Los pacientes pueden obtener una receta a través de telesalud o de un dermatólogo.